Volando. Dicen que cuando uno se divierte el tiempo pasa más rápido.
Hace exactamente un año dejaba la casa de mis padres para comenzar mi nuevo hogar.
Voy a hacer un pequeño análisis de lo que dejaron estos 366 días.
Cosas positivas:
+La peleas con mi familia disminuyeron notablemente. El no vivir la rutina ayuda. Las peleas al pedo no existen y se aprovechan más los momentos de encuentro.
+Me miman más. "Pobre, no debe comer nada", "llevate un tupper", "Te compramos..." Ventajas de estar viviendo fuera de casa.
+Vivir con mi novia mejoró nuestro vínculo. Sin dudas es uno de los exámenes más importantes como pareja.
+Soledad. Muy pocas veces estaba solo en mí casa anterior. Hoy es más fácil que se dé. Disfruto de algunos de esos momentos.
+Horarios propios. No dependo de casi nadie para cenar, despertarme, dormirme, hacer ruido, hacer silencio, etc.
+Pileta.
Cosas a mejorar:
-Sigo mandando la ropa a lavar a lo de mis padres.
-¡Qué caro que está todo!
-Aun no entiendo bien el vínculo entre vecinos de edificio. Extraño a mis vecinos de casa.
-Si bien en la cocina mejoré un 342%, aún falta mucho esfuerzo y dedicación.
Cosas que no entiendo:
-¿Cuándo se puede decir que el departamento está listo y no necesita nuevas compras?
-¿En qué piensa la gente que martilla o agujerea en horarios de sueño?
-¿Existe algún administrador de consorcio honesto y eficiente?
-¿Puedo salir y tirar las cosas directo en el tacho de basura de mi piso? o ¿Es obligatorio meterlo previamente en una bolsa?
-¿Cuán mal está tirar cositas (uñas, migas, polvo, pelos) por el balcón?